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AJEDREZ- Omar Khayyám

  AJEDREZ- Omar Khayyám   Porque esta vida no es -como probaros espero-, más que un difuso tablero de complicados ajedrez.   Los cuadros blancos: los días los cuadros negros: las noches...   Y ante el tablero, el destino acciona allí con los hombres, como con piezas que mueven a su capricho sin orden...   Y uno tras otro al estuche Van. De la nada sin nombre   Publicado en:  http://ajedrezticul.galeon.com/poesias/page5.ht

JAQUE MATE - ERNESTO SPINOSA

  JAQUE MATE - ERNESTO SPINOSA   En un tablero de ajedrez, tú, serías la reina de las blancas el centro de todas las miradas esbelta y orgullosa caminarías sin que nadie lo pueda impedir.   Yo en cambio sería el rey del otro bando ambicioso y guerrero con ánimo de triunfar pondría los ojos sobre ti.   Al calor del combate ordenaría a mis tropas que su única misión sea capturarte a como dé lugar o morir en el intento.   Trazaría alguna estrategia rompería todas las reglas del juego haría todas las trampas posibles para ponerte en jaque mate y tenerte rendida en mis brazos.   Publicado en:  http://www.poemas-del-alma.com/blog/mostrar-poema-258902

Jaque al amor - Hermes Varillas Labrador

  “Jaque al amor” - Hermes Varillas Labrador   Si he de jugar contigo que sea sólo ajedrez con arrojo e intrepidez en un juego divertido,   que mi mejor ataque sean mis mil cumplidos y en un magistral jaque de astucia y de rapidez   para enfrentar tu torneo y admirando tus rodeos sacrifico mis leales peones en enroque con tus pasiones cabalgando sin jadeos en tus muchos devaneos de tu gracia convencido luego de amoroso traspiés regio y de hinojos a tus pies finalmente rendirme vencido.

JAQUE MATE

  JAQUE MATE En tu día, no pienses que puedes hacer lo que quieres conmigo ¡Basta! basta de insultarme, de jugar, de imponerte como el rey del tablero de ajedrez. Para ti no soy más que un simple peón que está al frente para defenderte, y utilizarme de la forma más conveniente. La primavera muere conmigo, Y me ha estremecido, la furia con que llega el frío que ha votado de un soplo tu retrato de supuesto macho cabrío. Conocías mis debilidades, Sabías que eras tú, Y te valías de la situación, Para dañarme. En mi sentir eras todo el amor que anhelé, Pero en la caricia inexistente, y la mirada inclemente encontré tu alma falsa. Aquel beso que me has dado, no es más que una larga y dolorosa despedida, aunque no te guste la idea tendrás que dejarme en armonía. Sabes que voy a marcharme, Lo has intuido, En tu sentido llevarás mis recuerdos vividos, Pues tú únicamente has sabido Cuanto te he querido.   Publicado en:  http://www.dedicapoemas.com/JAQUE+M

Ajedrez - Gerardo Diego

  Ajedrez - Gerardo Diego A Luis Zubillaga. Hoy lo he visto claro  Todos mis poemas  son solo epitafios   Debajo de cada cuartilla  siempre hay un poco de mis huesos   Y aquí en mi corazón  se ha careado el piano   No sé quién habrá sido  pero del reloj  en vez del péndulo vivo  colgaba un ancla anclada   Y sin embargo  todavía del paracaídas  llueven los cánticos   Alguna vez ha de ser  La muerte y la vida  me están  jugando al ajedrez   Publicado en:  http://revistas.edaddeplata.org

AJEDREZ - Rosario Castellanos

  AJEDREZ - Rosario Castellanos   Porque éramos amigos y, a ratos, nos amábamos; quizá para añadir otro interés a los muchos que ya nos obligaban decidimos jugar juegos de inteligencia.   Pusimos un tablero enfrente de nosotros: equitativo en piezas, en valores, en posibilidad de movimientos. Aprendimos las reglas, les juramos respeto y empezó la partida.   Henos aquí hace un siglo, sentados, meditando encarnizadamente cómo dar el zarpazo último que aniquile de modo inapelable y, para siempre, al otro.   Publicado en:  http://www.poemas-del-alma.com/

Ajedrez Jorge Luis Borges

Ajedrez I En su grave rincón, los jugadores rigen las lentas piezas. El tablero los demora hasta el alba en su severo ámbito en que se odian dos colores. Adentro irradian mágicos rigores las formas: torre homérica, ligero caballo, armada reina, rey postrero, oblicuo alfil y peones agresores. Cuando los jugadores se hayan ido, cuando el tiempo los haya consumido, ciertamente no habrá cesado el rito. En el Oriente se encendió esta guerra cuyo anfiteatro es hoy toda la Tierra. Como el otro, este juego es infinito. II Tenue rey, sesgo alfil, encarnizada reina, torre directa y peón ladino sobre lo negro y blanco del camino buscan y libran su batalla armada. No saben que la mano señalada del jugador gobierna su destino, no saben que un rigor adamantino sujeta su albedrío y su jornada. También el jugador es prisionero (la sentencia es de Omar) de otro tablero de negras noches y de blancos días. Dios mueve al jugador, y éste, la pieza. ¿Qué Dios detrás de Dio